En medio de la ola de incendios que azotan la zona centro sur de nuestro país, dejando devastadores consecuencias —en especial en aquellas localidades que han visto agravada esta tragedia con la lamentable pérdida de vidas humanas—, hacemos un urgente llamado a las autoridades para que implementen y ejecuten rigurosas medidas que apunten a evitar la generación de nuevos incendios.
Lo anterior, debido a que —recién en la mitad de la temporada de incendios— las personas dedicadas a la detección y combate del fuego, tanto de Conaf como del ámbito privado, se encuentran sobreexigidas y, en algunos casos, sobrepasadas ante la magnitud de esta tragedia.
Tenemos la profunda convicción que para controlar la ocurrencia de nuevos incendios, los que en un 99% son provocados por personas, ya sea por negligencia o por intencionalidad, es fundamental la prevención y la anticipación, a la par de entregar poderosas señales a la ciudadanía.
Es por ello que contribuimos con las siguientes recomendaciones, de corto y mediano plazo, para aportar a enfrentar esta severa contingencia:
- Empoderar a las autoridades regionales y comunales, dada su experiencia y conocimiento de los territorios, para la coordinación y disposición de los recursos necesarios para enfrentar cada emergencia.
- Fortalecer, incrementar y reforzar el patrullaje militar y policial permanente durante el día y la noche, distribuidos en la región y en especial en aquellas zonas de alta ocurrencia de incendios.
- Prohibir todo uso de fuego en zonas rurales.
- Sensibilizar a la población, a través de campañas informativas, en evitar cualquier actividad que genere amenaza de incendio.
- Cuando se compruebe la intencionalidad o negligencia en un incendio, quienes cometan estos gravísimos delitos no pueden tener ni sentir que hay impunidad. Es imprescindible robustecer las medidas cautelares, como la prisión preventiva para los responsables, aplicando todo el rigor de la ley, dado que claramente constituyen un evidente peligro para la sociedad.
- Para terminar con la sensación de falta de sanciones y condenas a quienes provocan los incendios, es necesario fortalecer la legislación de delitos relacionados, tal como se hizo con la Ley de Robo de Madera.
Adicionalmente, sugerimos avanzar vigorosamente desde ya en un plan de reconstrucción y recuperación social, ambiental y productiva en los territorios y ecosistemas afectados, considerando lo siguiente:
- Existen miles de pequeños propietarios y emprendedores agrícolas, forestales y turísticos que necesitan ser apoyados para que recuperen su sustento familiar.
- Elaboración de un plan de reconstrucción de infraestructura social como viviendas, hospitales y escuelas.
- Desarrollo de un programa de recuperación y protección de suelos, bosques, agua y biodiversidad.
- Implementación de un plan de ordenamiento territorial por comuna, que involucre el riesgo y prevención de incendios, dado que hoy existen cientos de parcelas y viviendas en zonas rurales sin regulación alguna.
Ante el escenario que enfrentamos hoy, marcado por la crisis climática, apelamos a la corresponsabilidad de las personas y a cuidar cada una de las actividades que se realizan en el entorno de la naturaleza y que son potenciales en riesgo de incendio. Tal como lo constatamos actualmente, pueden tener consecuencias catastróficas para las personas, las familias, las comunidades y los ecosistemas.
En esta tragedia, como gremios regionales y empresas asociadas, estamos y seguiremos solidarizando y colaborando intensamente con las personas afectadas y sus territorios, con pleno convencimiento que juntos saldremos adelante en el rol que a cada uno nos corresponde en la sociedad.
CPC Biobío / Irade / Asipes / Corma / Asexma Bio Bio / PymeMad / Socabio / Asem Biobío
Concepción, 9 de febrero de 2023