Reforma laboral: bienvenido el diálogo
Luego de ser aprobada en la Cámara Baja en junio, el proyecto de Reforma Laboral comienza hoy su tramitación en el Senado, con la expectativa de que la discusión incorpore, esta vez, la visión de todos los sectores.
Si bien hay coincidencias en que es necesario modernizar el mercado laboral, ha quedado en evidencia que tanto el empresariado como los trabajadores no reconocen coincidencias en la iniciativa legal, tal como se ha planteado hasta ahora. El trabajo prelegislativo finalmente fue puramente informativo y no se alteró en lo más mínimo el proyecto original.
Los gremios empresariales hemos sido enfáticos en plantear que el proyecto parte de un diagnóstico equivocado, al señalar que, por ejemplo, “las relaciones laborales se caracterizan por una falta de confianza y colaboración”, lo que no se condice con los resultados de la encuesta Bicentenario 2013, en la que un 72% de los trabajadores manifiestan sentir mucha o bastante confianza en la empresa en que trabajan. Por tanto, la iniciativa legal asume que las relaciones laborales al interior de las empresas son negativas y conflictivas, lo que se aleja completamente de la realidad.
Nos preocupa, además, la imposibilidad de reemplazo en huelga y la sindicalización obligatoria. Son dos aspectos que van en el sentido contrario de la libertad de administración de los empleadores y de afiliación de los trabajadores. Por otra parte, el proyecto deja fuera de la discusión mecanismos que incentiven la participación laboral de jóvenes y mujeres (que poseen las mayores tasas de desempleo) y omite temas tan relevantes como la flexibilidad laboral.
Estamos conscientes de que la tarea no es fácil, pero una política pública de tan profundo alcance como la Reforma Laboral debe ser dialogada y debatida por todos los sectores.
La discusión legislativa, que comienza este lunes con sesión de la Comisión del Trabajo del Senado, deberá propender a compatibilizar los aspectos relevantes para la economía y acercar posiciones, con una mirada global de bien común, sin sesgos ideológicos y procurando una visión de estado, para que la nueva normativa efectivamente logre cuidar las condiciones en que se desarrollan las empresas, mejore el bienestar de todos los trabajadores e impulse la productividad de nuestra economía y la generación de empleo.
Hernán Celis Calonge, Presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción
