[vc_single_image alignment=»center» img_link_target=»_self» image=»17166″]Para estimular el alicaído crecimiento, la mayoría empresarios de la región del Biobío cree que es necesario incentivar la inversión, fomentar la productividad y mejorar la infraestructura y conectividad. Éste fue uno de los principales resultados de la 12° edición del Índice de Percepción Empresarial Regional (IPER), que cada semestre realiza EY (ex Ernst & Young) en conjunto con la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción (CPCC), y la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello (UNAB).
En términos generales, el IPER del primer semestre del año retrocedió un punto a 50 puntos, nivel que no se registraba desde junio de 2015. Este descenso se explica principalmente porque el 72% de las empresas encuestadas, 28 puntos porcentuales más en la medición anterior, estiman que el PIB del país en 2017 crecerá menos de 1,5%.
«Los resultados del IPER nos muestran una Región del Biobío que está cautelosa frente al actual escenario económico. Una zona que sin duda requiere de mayor inversión para potenciar su crecimiento y desarrollo productivo, y del trabajo coordinado entre los sectores público y privado, para que la concreción y consolidación de proyectos hagan repuntar la economía local», indicó el presidente de CPCC, Ricardo Gouët.
En tanto, respecto a los resultados generales de la medición, Roberto Darrigrandi, decano de la Facultad de Economía y Negocios de la UNAB, comentó que “tiene una lectura marginalmente negativa con respecto al anterior, dado que la percepción empresarial de la región es capaz de mostrar una leve, pero no significativa caída, de la mano de una región que muestra un descenso de 3,1% en el Indicador de Actividad Económica Regional (INACER) en el primer trimestre de 2017, en comparación al mismo período del año anterior”.
Al consultarles a los encuestados cuáles son los temas prioritarios para estimular el crecimiento, un 66% indicó que prioritario es impulsar la inversión. Además, estiman necesario fomentar la productividad (45%) y mejorar infraestructura y conectividad (40%).
Expectativas para las empresas
En cuanto a los potenciales riesgos para las empresas, el más relevante, al igual que en las dos mediciones anteriores, es la incertidumbre que genera la aplicación de nuevas leyes (78%), como las relacionadas a las reformas tributarias. Es así como el 61% del total de los encuestados, estima que la reforma tributaria, ya implementada en el país, tiene un impacto negativo en sus empresas; el 39% la considera neutra y nadie cree que su aplicación sea beneficiosa. Además, un 73% de los encuestados cree que la reforma laboral provocará una disminución en el empleo de la región, aunque quienes esperan que aumente, subió de 5% a 12%.
Francisco Avendaño, socio de Assurance de EY señaló: “en este escenario que vemos, las empresas deben seguir avanzando en la optimización de sus procesos internos. Ser innovadoras y replantearse cómo hacen las cosas, abordando las nuevas tecnologías para evolucionar”.