Recuperar el nivel de actividad prepandemia, hacer frente a la inflación, alza de combustibles y nudos logísticos son parte de los actuales desafíos. Lo pendiente es lograr mayor participación de mujeres en la actividad gremial.
Cabe recordar que se trata de una organización que actualmente agrupa a más de 130 empresas asociadas y siete gremios.
– ¿Qué materias resultan de especial preocupación para el gremio respecto de la convención constitucional?
– Se relacionan con el emprendimiento libre, la propiedad privada, uso del agua, entre muchos otros. Las materias que se están discutiendo en esa instancia, están directamente relacionadas con el futuro de nuestro país y es ahí donde la base del desarrollo de Chile está en juego. La Constitución es el gran marco de referencia sobre el cual se cimentará el futuro del país y de sus habitantes. Y nos preocupa la mirada anti sistémica de algunos sectores radicalizados, que pudieran socavar nuestra historia país. ¿Es necesario volver caminar lo ya andado o enfrentamos el futuro como un desafío transversal?
– ¿Cuáles son los desafíos más relevantes para las empresas de Biobío en el marco de las contingencias actuales?
– En primer lugar, recuperar el nivel de actividad que tenían antes de la pandemia e incluso antes del 18 de octubre de 2019. Y en segundo lugar y no menos importante, es cómo enfrentar el presente y futuro, con variables exógenas como la alta inflación, el alza de los combustibles, alza de precios y nudos en la logística nacional y mundial, disponibilidad de buques y contenedores para exportación, entre otros.
A nivel más micro, muchas empresas de los más diversos tamaños y sectores de nuestra economía están en un proceso de reposicionarse, mejorar eficiencias en sus procesos incluyendo, potenciar la digitalización en la gestión productiva y comercial.
-¿Cuáles han sido los principales avances en estos 95 años y los desafíos que están pendientes?
– La CPC Biobío ha participado en el quehacer regional desde 1927 y su rol articulador público-privado ha sido esencial durante sus 95 años de existencia, apoyando a nuestra región en forma transversal, sobre la base que el sector privado es el motor del desarrollo y el bienestar de las personas. Entre los múltiples desafíos pendientes, el directorio y el equipo ejecutivo están fuertemente enfocados en una mayor participación de mujeres en la actividad gremial, a través de los comités gremiales y del directorio.
-¿Qué falta para volver a tener nuevamente una presidenta mujer al frente de las empresas de la Región y qué avances existen en materia de equidad de género al interior del gremio?
– Se está trabajando fuertemente a través de una comisión de género y liderazgo, en atraer más mujeres a la directiva de la cámara y así contar con mayor presencia femenina, que se traduzca en nuevas líderes gremiales. En lo que respecta a los ejecutivos de la cámara, cabe destacar que el 80% de los colaboradores son mujeres, lo que demuestra la firme intención de su directorio de avanzar en este sentido.
-¿Qué áreas de acción centra el actual trabajo del gremio y cuáles son sus proyecciones?
– Dado que la CPC Biobío es una multigremial que aglutina a los más diversos sectores de la economía regional, canaliza parte de su accionar a través de sus cinco comités gremiales, que abarcan temas tales como medio ambiente, sostenibilidad, mujeres y liderazgo, desarrollo productivo, innovación y articulación con el sector público.
